En una sesión de Osteopatía, mis manos sienten, escuchan y perciben los bloqueos de tu cuerpo. Detectan tensiones, restricciones o falta de movimiento, y suavemente invitan a tus tejidos a liberar la tensión.
Porque tu cuerpo dispone de fuerzas de autorregulación y curación propia, son ellas las que hacen el trabajo de curación.
Así, se movilizan y flexibilizan todos los tejidos del cuerpo, se equilibra el sistema nervioso, se liberan tensiones óseas, musculares y viscerales, accediendo a un profundo estado de relajación, y bienestar físico y emocional.
Nuestra tarea juntos, es conectar con la potencia de ese Poder Curativo Interno que siempre está ahí.
La Osteopatía Fluido Energética no realiza manipulaciones osteoarticulares ni fuerzas desde afuera para el tratamiento, en cambio usa un contacto suave y delicado, porque es así como se perciben las cualidades de las diferentes estructuras, fluidos y energías sutiles del cuerpo.
Trabaja sobre tres pilares fundamentales, el sistema craneosacro, el musculoesquelético y el visceral.
Los problemas agudos o de urgencia deberán ser tratados en primera instancia por la medicina convencional. En esos casos, la Osteopatía es un tratamiento que acompaña a los pacientes.
